sábado, 20 de abril de 2013

Aprendi a rimar cicatriz con epidemia

Y dice la canción: ... Adrendi a rimar cicatriz con epidemia..
Con mas razón que un santo, hace esta afirmación Sabina, y es que, cuantos somos los que tenemos cicatrices en el alma por amor??? Dudo que no haya nadie que no las tenga.
Es una epidemia, hemos dejado de hacer felices a la gente que nos rodea, para ser mezquinos, ególatras, caprichosos y consentidos.
Nos pasamos la vida buscando ese amor apasionado e intenso que nos convierte en personas sin control.
No somos malditos con quienes lo son con nosotros, somos malditos con quienes nos permiten serlo con ellos, porque nos aman, nos aprecian, y nos admiran... Somos malditos cuando el sentimiento no es mutuo, cuando nos vemos en una liga superior...
Vamos por el mundo cargados de cicatrices, mutilados por dentro, buscando la felicidad en un desahogo que solo dura lo que tardas en llegar al orgasmo.
Hemos dejado de ser capaces de mirar a los demás, hemos dejado de ser capaces de amar sin condiciones, de aceptar a la gente tal y como es, con sus cicatrices, sus miedos y sus fobias.
A cambio nos pasamos la vida lamiéndolos las heridas, rememorando nuestro propio dolor, sin ser capaz de seguir adelante, de conocer a gente nueva sin prejuiciarlos a los 5 minutos.
Envejecemos llenos de cicatrices y no hemos aprendido a vivir con ellas y seguir adelante...

Estar llenos de cicatrices ya no es cuestion de unos pocos locos, andar con cicatrices es un mal de muchos y un secreto inconfesable...

No hay comentarios:

Publicar un comentario